A LOS MAYAS NO LES SALEN LAS CUENTAS

   El calendario Maya necesita un ajuste. Hasta ahora se suponía que el cambio de ciclo para la Tierra tendría lugar el 21-12-2012. Pero nos ha salido un cometa por ahí, llamado Elenin , (qué bonito nombre) , que puede trastocar esas fechas...¡Cachisss!, yo que empezaba ya a pensar que los mayas iban a tener razón y dentro de un año veríamos a los leones departiendo amigablemente con los carneros , (algo así dice la Biblia) , y un nuevo amanecer para el género humano, donde descubriríamos nuestras facultades paranormales, etc etc...y va a resultar que para esas fechas ni Dios va a seguir vivo en este planeta.

Tampoco va a ser verdad, aquello de que los "dioses" de Nibiru, el enorme planeta donde supuestamente habita la raza alienígena que nos creó, vayan a venir a visitarnos a la Tierra, y si vienen, pues se van a encontrar con que ya no hay nadie en casa, ni siquiera los políticos que suelen ser los primeros en acudir a recibir a los "visitantes" importantes, y de paso cobrar las dietas y el ágape pantagruélico que pagan los ciudadanos con sus impuestos.

   Por si lo de los mayas nos parece poco, resulta que también el "código de la Biblia" nos anuncia que el fin del mundo se producirá en el 2012, y supongo que los testigos de Jeová también se apuntarán a este fin del mundo con la esperanza de acertar, porque llevan anunciando el juicio final desde el 1900 por lo menos, y hasta ahora no han tenido mucho éxito. Parecen demasiadas profecías para cumplirse todas en el mismo año, aunque desde mi punto de vista todas hierran en lo esencial, que es definir claramente qué se supone que es "el fin del mundo".
Hercóbulus ó Nibiru


   Porque en realidad el "mundo" se acaba cada vez que desaparece una civilización, es decir, que la caída del Imperio Romano fue verdaderamente el fin del mundo, al menos para los romanos y desde entonces hasta ahora muchos mundos han caído y otros nuevos han ocupado su lugar.

   No entiendo por qué en esta ocasión las cosas habrían de ser diferentes. Ni el por qué de ese empeño en anunciar calamitosas catástrofes y millones de muertos y una renovación "cuasi divina" de la raza humana, cuando la experiencia nos demuestra que en lo esencial, el género humano nunca cambia demasiado, y cuando cambia, suele ser por la fuerza y no necesariamente a mejor. Para explicar esta convicción personal, pondré un ejemplo muy gráfico.

   Cuando los Cartagineses iniciaron la conquista de Hispania llegaron a un acuerdo con sus rivales los romanos. Por ese acuerdo Cartago se comprometía a no extender sus conquistas más allá del río Ibero,(Ebro) . Dentro del área de expansión cartaginesa marcada por este tratado, quedaba la ciudad de Sagunto, que sin embargo era fiel aliada de Roma.

   Sobre el papel, Cartago no traicionó la letra de este pacto al conquistar Sagunto, pero la toma de esta ciudad acabó sirviendo de excusa a los Romanos para iniciar la guerra con el Imperio norte-africano. De hecho los habitantes de Sagunto, que esperaron durante meses la ayuda de su "fiel" y poderosa aliada Roma, fueron exterminados sin contemplaciones por los ocupantes cuando entraron por fin en la ciudad, como castigo a su heroica y tenaz resistencia, fueron todos pasados a cuchillo hombres, mujeres y niños.


  Muy al contrario de indignarse ó tan siquiera protestar por la innecesaria, cruel y espeluznante matanza sufrida
por sus aliados hispanos, los romanos se mostraron comprensivos con Cartago. "¿Después de todo qué otra cosa podía hacerse ante enemigos que habían demostrado tan tenaz resistencia?", manifestaron los Senadores romanos.

   Podríamos pensar que un suceso así sería prácticamente imposible que sucediera en nuestros días, que en nuestro mundo del siglo XXI, ética y moralmente tales actos no tienen cabida y que si cualquier gobierno, ejercito ó facción cometiese actos similares, la comunidad internacional respondería prontamente y castigaría severamente a los culpables.

   Pondríamos como ejemplo la intervención militar en la guerra de la ex-Yugoslavia, el apoyo a la primavera árabe y contra los tiranos que masacran a su pueblo , (bueno el apoyo que se dio a los Libios, porque los Sirios tienen la desgracia de que su tirano presidente sea todo un hijo de... "Putin") ,
Podríamos pensar que nuestro mundo es mucho mejor y más justo que aquel mundo antiguo de Roma y Cartago, pero lamentablemente...nos equivocaríamos.

   Hoy en día nuestros países, nuestros gobernantes elegidos democráticamente cometen actos de la misma catadura moral que los que cometían aquellos Senadores de Roma y Cartago.

 Nosotros sabemos que lo hacen y callamos. Sabemos , (la ignorancia ya no es una excusa) , que millones de personas mueren de hambre cada día, cuando la verdad es que en el mundo hay suficiente pan para todos.

   Sabemos que nuestro nivel de vida es el que es, porque millones de seres humanos, hombres mujeres y niños, sufren condiciones insalubres y terriblemente penosas de trabajo en esclavitud para fabricar el calzado y el vestido de "marca" que tanto se lleva esta temporada. Y al igual que el Senado de la antigua Roma, ninguno de nosotros protestó jamás ni nuestros gobiernos dijeron nada.

   Sabíamos también que en Etiopía se iba a producir la sequía y la hambruna más terrible de los últimos tiempos, que en los mercados internacionales se especula maliciosamente con el precio del tabaco, del algodón y del café, y que esos precios condenan a la ruina y al hambre a millares de honrados agricultores en América Latina y África, y seguimos sin hacer nada.

   Podría poner infinidad de ejemplos de lo mucho que en estos miles de años el "mundo ha mejorado" , pero creo que con esta "pequeña" muestra basta para demostrar que digan lo que digan los Mayas, el mundo puede tal vez caer, la sociedad hundirse y volver algún día a resucitar, pero el ser humano siempre va a ser el mismo, el más cruel y despiadado de todos los animales.




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